Los pendientes de Tere

Todos bien sabemos algo de la buena de Tere. Esa persona amable, apacible, enemiga del alcohol, esa que aprobó las oposiciones recientemente. Si si, esa misma. La madre de Güillerminus el Pequerrecho. Esa que está casada con ese hombre al que algunos llaman Serafín y que yo siempre digo que su palo es de madera de Boj natural y sintética (¿qué estoy diciendo?) para meterme con él. Pues bien de ella quiero hablar hoy. De ella... bueno, de sus colgarejos. Famosos son para mi. Sobre todo sus pendientes. Tiene cientos y cientos, de variedades inimaginables, desde lechugas hasta repollos pasando por ranas, avispas y más bichejos. Unos pendientes perfectos para la madre de Güille, del que todos sabemos sus aficiones, en especial la bichuchería. Pues bien, imagínense ustedes, mis queridos senderistas, lectores asiduos a este blog y que tanto amáis al Club Deportivo IAR, la situación. Serafín caminando con su vara de madera de boj (¿apolillada? Quizás), Güille observando un coleóptero africano de triple alerón trasero con propulsión delantera y con resistencia lateral al viento y por supuesto hembra dado su tamaño desproporcionado y la ausencia de... de nacasones (huevos comúnmente llamados) , y Teresa, Teresa, con sus colgarejos, ya sean los repollos, las avispas, las ranas o, mis preferidos, los huevos de Faberyè (¿O eran Kinder?) La verdad, no lo sé. Lo único que sé es que son fantásticos, muy originales, perfectos. Perfectos para una mujer como Tere, una mujer a la que todos tanto queremos. Y por ello hablo de ella hoy, porque sé que ella lee mis artículos, cada día, o eso espero. A Serafín le mando un saludo, y no hablo más de su vara, porque luego me pasa factura.

Amigos, senderistas, esto es todo por hoy. Ya sabéis algo más de este mundo senderista, y de sus gentes. Que conste en acta que lo que digo de Tere es todo una... ¿Cómo se dice? ¿Hipérbole? ¿Metáfora? ¿Aliteración? ¡Ah si! Humor, si si, porque de eso nos sobra a los de IAR, nos sobra humor, pero no lo vamos a dar a nadie, es nuestro y lo seguiremos utilizando en estos blogs que tanto nos gustan, y que tan poca gente nos lee. El Senderista Dant ha vuelto con fuerza, por fin. Ahora sí que tengo ganas de escribir, de hablar de todos y cada uno de nosotros. Porque nunca, nunca sabes cuando te tocará aparecer en el blog del Senderista Dant.

_Dant_